El Chelsea comenzó la temporada con todo lo que había terminado en la anterior, con cuatro derrotas consecutivas, incluyendo una derrota por 6-5 contra el Manchester United, la cual dejó al equipo en lugar 12º en noviembre de 1954. A partir de ahí el equipo entra en una racha ganadora, perdiendo sólo tres de los próximos 25 juegos y ganando el título con un juego de repuesto después de una victoria por 3-0 contra el Sheffield Wednesday en el Día de San Jorge.